O al menos esa es la alerta lanzada por Barones Greenfield, una neurocientífica de la Universidad de Oxford y directora de la Royal Institution, que cree que sitios como Bebo, Twitter y Facebook ocasionan daños mentales, sobre todo en los menores de edad.
Según informa Greenfield, de 30 años, es la tendencia de los jóvenes de cada vez interactuar más virtualmente lo que hace preocupante esta situación, el grado de dependencia de loggearse en sus cuentas para mantener al tanto a sus contactos, de estar ‘conectados’ siempre pendientes de saber lo que otros hacen y dar a conocer qué es lo que ellos hacen, lo que lo hace peligroso.
Es que se han hecho constantes las críticas de padres y profesores quejándose que la masa juvenil cada vez más pasan concentrados en comunicarse, pero haciéndolo a través de sus pantallas.
Son más de 150 millones los que usamos Facebook para mantenernos al tanto de nuestros amigos, subir fotos y videos y postear actualizaciones de nuestros movimientos y pensamientos de vez en cuando.